Abrió un paquete de papas fritas y se llevó una desagradable sorpresa

Una enfermera veterinaria abrió un paquete de papas fritas y lo compartió con sus compañeros de trabajo, pero al llegar al final de la bolsa, encontró un pedazo de hueso, que al parecer era de un dedo.

La enfermera comenzó a sentirse descompuesta luego de encontrar el hueso en el fondo del paquete. La mujer aseguró que, según sus conocimientos, se trata de “una especie de falange”, pero que, de pertenecer a un ser humano, no se correspondería con un adulto.

“Parece un poco demasiado grande para ser un roedor. Tendría que ser uno muy grande, si de hecho es una falange”, consideró.

“Realmente, no estamos seguros”, admitió la consumidora. “Es casi del tamaño de una falange proximal humana, pero un poco pequeña”, señaló la mujer al respecto del hueso. “Si no es humano, podría ser de una criatura que expiró en el campo y fue ‘cosechada’, o algún tipo de alimaña”, agregó.

La mujer que compró las papas fritas decidió ponerse en contacto con Calbee, la compañía que hace la elaboración de los paquetes de papas fritas. “Lamentamos saber que se sintió decepcionada con su reciente compra. Como nuestro valioso consumidor, le damos un gran valor a la salud, la seguridad y la satisfacción de usted y su familia”, indica la respuesta de la fábrica.

“Debido a que lidiamos con algunas cosas bastante asquerosas en el trabajo, se necesita mucho para asquearnos”, reconoció la enfermera veterinaria.