Cambió el consumo de carnes y el hígado y los menudos ganan terreno
El primer mes del año comenzó con un cambio en la tendencia del consumo de carnes y un viraje hacia cortes que hasta hace un par de meses, no figuraban con una demanda tan intensa como sí sucedió en estas últimas semanas, de acuerdo con lo señalado por diferentes carniceros y distribuidores de carne bovina, aviar y porcina.
En este sentido, cortes de carne vacuna como las achuras y las menudencias que hasta hace un tiempo no tenían una demanda tan fuerte, este mes comenzaron a elegirse más. La situación se muestra marcada por el eslogan de estos tiempos: “No hay plata”. Y la poca que hay se trata de optimizar en cada compra.
Jorge, un de los propietarios de una cadena de carnicerías, extendida por toda la ciudad indicó que “en los últimos 30 días sí, ha aumentado fuertemente la demanda de menudencias con respecto de los cortes tradicionales de carne vacuna”. Confirmó en ese sentido que “ha crecido un 40% el consumo de menudencia contra enero del año anterior”.
Por su parte, Pablo, propietario de una carnicería en la zona céntrica, indicó que “la mayoría de los cortes de carne vacuna siguen con una demanda muy baja, pero en estos días hemos sacado una oferta de 4 kilogramos de puchero variado por $3.000 y hemos vendido todo, no ha quedado nada. Hasta hace un par de meses vendía unos 20 kilogramos de hígado por semana, pero ahora estoy vendiendo 40 kilogramos, el doble. Lo mismo con el osobuco que está en unos $4.000 el kilogramo”. Agregó que en lo que es pollo, “la carcaza con el menudo es lo que más sale cada día. No nos queda nada”.
A su turno, Karina Sández, histórica propietaria en el mercado Armonía de “Achuras Lucía”, señaló que “las achuras no han estado exentas de todos los aumentos excesivos que han tenido los productos en el país. Pero ante la baja demanda de la carne, ha aumentado la demanda de achuras y como los frigoríficos faenan poco por la caída de la demanda de carne vacuna, entonces se ha encarecido muchísimo la achura”.
Destacó que “ha habido un aumento muy fuerte de las achuras. En una semana han subido dos veces. Cuando terminaba el año el hígado estaba en $1.600 el kilogramo, a la semana ha subido a $2.000 y ahora $2.200 el kilogramo”. Si bien la suba que señala Sández es importante, un kilogramo de achuras como el corte de hígado, tiene un costo equivalente al 50% prácticamente de un blando de primera para milanesas o para bifes. En su caso, la venta es de unos 15 hígados por día, de unos 5 kilogramos promedio cada uno, con lo cual comercializa unos 75 kilogramos diarios. Si bien antes vendía unos 20 hígados, la caída no ha sido tan fuerte como en el resto de los cortes.
En tanto, Abel el propietario de una carnicería en la zona oeste de la ciudad,señaló que hasta hace un par de meses vendía 20 kilogramos de hígado por día. Pero ahora, “estamos vendiendo casi 60 kilogramos diario y varias veces nos quedamos sin mercadería para vender”.
El pollo
En tanto, este primer mes del año también aumentó la demanda de filet y de menudencia de pollo: Los dos extremos. Uno es de los cortes más caros y el otro, de los más baratos. “Antes no vendía ni una caja de alitas, pero la gente nos ha empezado a pedir y de no vender nada, hemos pasado a vender 20 cajas por semana. Lo mismo ha pasado con la carcaza de pollo, de no tener demanda ahora vendemos unas 15 cajas por semana e igual con los menudos”, sostuvo Jorge Lopez Saad, distribuidor de pollos Noelma. Agregó que “la carne mecanizada es una pasta de pollo, como la carne picada de vaca, nos falta, hemos pasado de vender 5 cajas a vender 50 cajas por semana”.
Los cortes a los que alude el distribuidor, tienen costos que oscilan para los minoristas entre los $350 a $1300 por kilogramo como la carcaza, los menudos o las alitas. De esos cortes, la carne mecanizada o lo que sería carne picada de pollo, ronda los $1500 por kilogramo de costo. De allí que proliferan las ofertas de esos cortes. Pero además el volumen que representan estas demandas, equivalen en el caso de los menudos y las alitas unos 600 kilos por semana, en la carcaza unos 300 kilos más y en la cantidad de carne mecanizada de pollo que se vende semanalmente ronda los 1000 kilogramos. Es decir, el nuevo consumo de estos cortes suma así 2 toneladas por semana en solo una de las distribuidoras que hay en la ciudad.
No obstante, también se consume filet. “En el verano siempre se vende mucho filet por la milanesa de pollo, además se compra un pedazo de filet y se hace ensalada, la gente se cuida más en la comida, por eso sale más el filet que ha aumentado un 30% en su consumo”, indicó. Otras interpretaciones también señalan que la gente que dejó de consumir todos los días carne vacuna, intercala al menos 3 ó 4 veces por semana el consumo de este corte.
El cerdo
En el caso del cerdo, el consumo comenzó en enero con un leve repunte, producto de una baja en sus precios que en diciembre subieron casi a la par de la carne vacuna. Gustavo Ledesma Campanini, distribuidor de carnes Campa, sostuvo que “el cerdo en diciembre antes de las fiestas había tenido una suba de precios innecesaria, lo cual ha bloqueado el consumo que ha caído prácticamente a cero ese mes”. Agregó que “esa caída aún persiste pese a que el precio ha bajado un 30% a inicios de mes y luego va cayendo alrededor de un 5% casi semanalmente. Por ejemplo una media res estaba en $2.800 el kilogramo y hoy oscila entre los $2.000 a $2.200 según la forma de pago”.
Señaló que si bien cada carnicería tiene su estrategia a la hora de vender cerdo,”hoy hay quienes tiene el kilogramo según el corte entre los $3.000 a $3.500 pero todavía estamos con ventas bajas, ha mejorado un poco la venta pero también largamos ofertas para ayudarle al carnicero. Se está consumiendo un poco más de cortes por media res, pero hay que tener en cuenta que venimos de una caída de consumo muy grande.
Fuente: El Liberal