Pese a la inflación, el bono de 70 mil pesos para los jubilados se mantiene sin cambios en abril
Pese a la inflación de este mes y la que se espera para el mes próximo, los jubilados y pensionados de haberes mínimos volverán a cobrar en abril el bono de hasta $ 70.000, según el decreto 268/2024 publicado este jueves en el Boletín Oficial.
De esta forma, y mientras se dilata el cambio de la fórmula previsional, en abril, los jubilados y pensionados cobrarán lo mismo que en marzo. Al haber mínimo de $ 134.445, se agrega este bono, por lo que recibirán un total de $ 204.445.
En relación a los $ 160.713 (haber mínimo de $ 105.713 más el bono de $ 55.000, de diciembre), los $ 204.445 representan una suba del 27,2% versus una inflación estimada del 57% a marzo (36,6% enero-febrero +, 15% marzo) o 72% si se agrega una suba de precios en abril del 10% abril.
Por su parte, los jubilados y pensionados con haberes inferiores a $ 204.445, pero superiores al haber mínimo recibirán un bono proporcional hasta alcanzar ese monto. Así, por ejemplo, un jubilado con un haber de $ 174.445 recibirá un bono de $ 30.000, alcanzando de esta forma los $ 204.445.
Los que no perciben bonos también cobrarán en abril lo mismo que en marzo.
Las pensiones no contributivas se mantienen en $ 94.112 más $ 70.000 del bono: $ 164.112. Y la PUAM (Pensión Universal al Adulto Mayor) seguirá en $ 107.557 más $ 70.000: total $ 177.556.
El artículo 7 del decreto ratifica que “la ayuda económica previsional que se otorga por el presente decreto no será susceptible de descuento alguno ni computable para ningún otro concepto”. Esto significa que no se integra al haber, no se calcula para el cobro del aguinaldo y futuros aumentos de movilidad y no tiene descuento para el PAMI.
Un año atrás, en abril 2023, los jubilados de haberes mínimos percibieron $ 58.665 más un bono de $ 15.000: total $ 73.665. Ahora, en abril percibirán $ 204.445, un incremento del 177% versus una inflación que podría rondar el 300%.
Durante el año pasado, por la disparada inflacionaria, las jubilaciones y pensiones sufrieron un fuerte deterioro. Con el salto inflacionario de diciembre, durante 2023, los jubilados y pensionados tuvieron una pérdida de entre 14,2% – en el caso de los que percibieron el bono para los haberes mínimos- y el 32,3% para los haberes medios y más altos.
En 2023, la movilidad fue del 110,9% y la inflación del 211,4%. Una pérdida del 32,3% que se suma a las pérdidas de los años anteriores.