Santiago del Estero ocupa el cuarto lugar en el ranking nacional de víctimas fatales en accidentes de tránsito

En el marco del Día Nacional de la Seguridad Vial, que se celebra este viernes, las estadísticas oficiales de siniestros en rutas y calles del país con víctimas fatales encienden todas las alarmas.

Un relevamiento de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) reveló que en el primer cuatrimestre del año fallecieron 1.339 personas en 1.200 siniestros fatales, un promedio de 11 víctimas por día, lo que fue calificado como “dramático” por el director ejecutivo la ANSV, Pablo Martínez Carignano. En ese lapso, Santiago del Estero registró 88 muertos en caminos, rutas y calles de la provincia, lo que la ubica cuarta en el ranking nacional que encabeza Buenos Aires.

Con la salvedad de que los datos relevados en todo el país muestran que este año la circulación creció un 24 por ciento en relación al mismo período de 2021, de enero a abril se registraron muchas víctimas fatales en las rutas y calles del país por siniestros que, en la mayoría de los casos, eran evitables.

Santiago del Estero está cuarta en cantidad de víctimas fatales (80); detrás de Buenos Aires (354), Córdoba (120), y Santa Fe (122).

En relación al perfil de las víctimas, los motociclistas son los principales afectados, ya que representan un 43 por ciento del total, con altos índices en jurisdicciones del norte del país, donde 6 de cada 10 víctimas son motociclistas. La no utilización del casco y los escasos controles es una problemática extendida, principalmente en pequeñas localidades.

Por su parte, los automovilistas fallecidos representan el 28 por ciento del total, y los peatones el 10 por ciento. El informe también revela que del total de víctimas fatales, el 75 por ciento eran hombres, que casi triplican a las mujeres (24 por ciento), y 4 de cada 10 tenían entre 15 y 34 años (38 por ciento).

Desde la ANSV consideran que si bien “la foto de las estadísticas es positiva en comparación con períodos anteriores, desde lo básico falta muchísimo para seguir trabajando”remarcó Pablo Martínez Carignano, director ejecutivo la ANSV.

“En los hospitales tenemos reportes que señalan que uno de cada tres traumatizados por accidentes dan positivo de alcoholemia. Eso marca todo lo que falta por hacer. Y desde esa perspectiva, se observa que la carencia no es sólo cultural o educativa, sino que también hay deficiencia en los controles”, admitió.

El funcionario consideró básico revertir “el problema urbano de las motos, principalmente en localidades pequeñas. Hay muchos hechos que, por razones de vínculos cercanos, cuestiones políticas o por ser conocidos o allegados, hacen la vista gorda, relajan los controles. Es ahí donde hace falta un compromiso mayor de los intendentes”, remarcó.