Tenía una perimetral, pero convivía con su novia y la mató
Hace tres semanas, la Justicia había dispuesto una orden que le impedía a Nahuel Maximiliano Shunk (27) acercarse a su pareja, Brunella Yemi Curie Centeno (23), luego de que ella lo denunciara por violencia de género. Sin embargo, según contaron familiares de la joven y vecinos, la medida no se cumplió: ambos seguían en la misma casa en la ciudad de Tandil.
El domingo por la mañana, Shunk se presentó espontáneamente en la comisaría 2° y confesó ante los policías que había estrangulado a Brunella hasta matarla.
Fue trasladada de urgencia por el SAME al Hospital Municipal Ramón Santamarina, donde poco después murió. Vecinos que declararon en el expediente mencionaron que habían escuchado una fuerte discusión en los instantes previos al ataque.
El viernes, dos días antes del femicidio, Brunella se había presentado en la sede del Centro de Atención a la Víctima en Tandil. “Se le hizo un acta donde ella manifestó que lo perdonaba, que quería levantar la denuncia y la restricción de acercamiento”, confiaron fuentes.
“El novio tenía rasgos perversos y ella siempre lo perdonaba”
Brunella había vuelto a convivir con su novio tres semanas después de haberlo denunciado. “Era una relación tóxica. Este hombre (Shunk) tenía rasgos perversos, pero ella siempre lo perdonaba, o bien pensaba que podía manejar esa situación”, agregó un vocero del caso.
El informe de los forenses que practicaron la autopsia determinó que la joven murió a causa de una asfixia mecánica. Shunk quedó detenido a disposición del fiscal José Marcos Eguzquiza, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°21.
Está imputado por “homicidio agravado por haber sido cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género (femicidio)”, delito que prevé la prisión perpetúa. Shunk se negó a declarar y seguirá detenido por orden de la jueza de Garantías N°2, Stella Maris Aracil.