Una frase de Máximo Thomsen puso en alerta al Servicio Penitenciario: “Mi vida no tiene sentido”

El rugbier que le dio las patadas finales al joven asesinado el 18 de enero de 2020 frente al boliche Le Brique de Villa Gesell estaría atravesando un estado de depresión y desde el Servicio Penitenciario Bonaerense están en estado de alerta ante la posibilidad de que intente hacerse daño.

“Mi vida no tiene sentido, nadie me quiere”, les habría dicho el joven a sus allegados, según informó Crónica TV, luego de que la condena provocara una ruptura de hecho en el grupo, que se encuentra temporalmente alojado en un pabellón del penal de Melchor Romero, desde donde serán derivados a otras cárceles para cumplir sus penas.

Esta frase fue advertida por las autoridades carcelarias, que “tienen miedo de que se quite la vida” por lo que adoptaron “medidas de resguardo de integridad física por miedo a que se lastimen ellos mismos por la depresión que padecen”.

Asimismo, el canal indicó que las fuentes carcelarias descartaron una pelea a golpes entre los jóvenes, que en las próximas semanas podrían ser separados. Los cinco condenados a cadena perpetua irían a una cárcel de máxima seguridad, mientras que los tres que recibieron una pena de 15 años serían trasladados a otro penal.