Brasil: al menos dos muertos y 30 desaparecidos por un desplazamiento de tierra
Al menos dos personas muertas y 30 desaparecidos es el saldo que dejó un desplazamiento de tierra que arrastró el último lunes a 16 vehículos en una carretera de Paraná, en el sur de Brasil. Las condiciones climáticas impedían a los socorristas avanzar con el operativo de rescate.
La avalancha ocurrió durante la noche del lunes pasado en la carretera BR 367, en el municipio de Guaratuba, estado de Paraná, golpeado por fuertes lluvias desde hace varios días. El lodo se llevó todo a su paso y cubrió varios metros del camino asfaltado, donde apenas se divisaban los vehículos. Quedaron sepultados diez autos y seis camiones.
Las Impresionantes imágenes difundidas por los bomberos muestran una enorme mancha marrón avanzando en medio de la frondosa vegetación de esta región montañosa. Hasta el momento, las difíciles tareas de rescate permitieron encontrar dos víctimas fatales y seis sobrevivientes.
Uno de las personas que se salvó fue el propio alcalde de Guaratuba, Roberto Justus. Junto a su chofer, estaba dentro de uno de los autos que fueron arrastrados por el alud de tierra. Lograron salir rompiendo los vidrios. “Fue horrible, la montaña se nos cayó encima y se llevó todos los carros. Solo estamos vivos por la gracia de Dios”, contó en un video que publicó en sus redes sociales.
Y completó: “Era mucha tierra, mucha piedra que vino para encima de los coches, el barro vino por debajo del coche, lo levantó y nos mandó encima de los otros que estaban parados”.
“Hay 54 bomberos trabajando de forma ininterrumpida, desde hace más de 35 horas”, informó en la tarde de este miércoles la Secretaría de Seguridad de Paraná.
Las lluvias complican las tareas de rescate
En tanto, explicó que las posibles lluvias son uno de los “principales desafíos” de los rescatistas, debido a la preocupación de que ocurran “nuevos deslizamientos”, añadió.
“No podemos precisar la cifra exacta de desaparecidos, porque en cada vehículo pueden ir de una a cinco personas. Nuestra hipótesis es que podría haber entre 30 y 50 desaparecidos”, dijo el comandante del cuerpo de bomberos de Paraná, Manoel Vasco de Figueiredo Junior.
Además, precisó que se está utilizando drones equipados con cámaras termográficas, aunque advirtió que el sensor de calor no sirvió para identificar a ningún otro sobreviviente, por lo que se cree que ya no quedan personas vivas en el lugar.
La policía de carreteras afirmó que la empresa concesionaria de la vía, Arteris Litoral Sul, tendría que haberla cerrado al tráfico toda la carretera tras el primer deslizamiento, que fue menos grave y ocurrió cuatro horas antes del desprendimiento principal.
La alerta meteorológica por lluvias intensas se extendió no solo a otros estados del sur de Brasil, sino también a otras regiones del país, según según el registro del Instituto Nacional de Meteorología (Inmet).
En el estado de Sergipe, al noroeste, al menos una persona murió esta madrugada tras ser arrastrada dentro de su vehículo cuando circulaba por una carretera.
Según las imágenes difundidas por la televisión, una parte del camino se desprendió por completo ante el enorme caudal de agua generado por la lluvia.