Hallaron a una joven asesinada: sus padres la identificaron por sus tatuajes
Los investigadores lograron identificar a la mujer que fue asesinada a puñaladas en su casa de Villa Lynch el pasado 17 de agosto. Los tatuajes jugaron un rol clave en el proceso de reconocimiento del cuerpo. Hasta el momento, hay dos detenidos por el femicidio, pero ambos se negaron a declarar.
La víctima es Gilda Antonella Tello, de 20 años, quien era madre de un niño y afrontaba problemas de adicciones. En un primer momento, las autoridades intentaron reconocer el cuerpo a través de las huellas dactilares, pero no obtuvieron resultados positivos.
El hallazgo se produjo el jueves por la tarde, cuando un móvil de la comisaría 1ra. del partido bonaerense de San Martín se hizo presente en una casa ubicada en la calle Boulogne Sur Mer al 5300 tras haber recibido una denuncia realizada por un hombre anónimo que alertó a los agentes acerca de la posibilidad de que hubiera ocurrido un asesinato.
Una vez que los efectivos ingresaron al lugar, se encontraron con el cadáver de una mujer que, a simple vista, tenía varias heridas de arma blanca alrededor del cuello. En ese momento, el cuerpo no había podido ser reconocido. La confirmación llegó luego de que sus padres identificaran los tatuajes que tenía la joven, según indicaron fuentes judiciales a Télam.
En la escena, los policías encontraron también a dos personas que, según se cree, intentaban trasladar el cadáver para descartarlo en otro sitio.
Luego de realizar el levantamiento de pruebas y elementos que podrían ser de interés para la causa, la fiscal a cargo de la investigación, Gabriela Disnan, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°5 del Departamento Judicial de San Martín, ordenó que se realice la autopsia correspondiente al cuerpo para poder esclarecer el hecho.
Las pericias revelaron que la víctima fue atacada a golpes y con un arma blanca, heridas que le ocasionaron la muerte. La fecha del deceso sería de unos tres a cuatro días antes de que encontraran el cuerpo.
Con respecto a las personas halladas en el lugar, una de las primeras decisiones de la fiscal fue ordenar su detención por ser los principales sospechosos del crimen. Se trata de dos hombres, uno de ellos fue imputado por el femicidio de la joven, mientras que el otro está acusado de encubrir el asesinato.
Este último es el dueño del domicilio donde fue encontrado el cadáver de Tello, por lo que los investigadores creen que fue quien ayudó al principal acusado a esconder el cuerpo. Los sospechosos fueron indagados durante la jornada del viernes, pero ambos se negaron a declarar.