Israel lanzó fuertes bombardeos en el centro y sur de Gaza tras ampliar su ofensiva contra Hamas
Ataques israelíes en el centro y sur de la Franja de Gaza mataron hoy a numerosos palestinos y dañaron una escuela y una mezquita, luego de que Israel ampliara su ofensiva contra el grupo islamista Hamas a áreas donde había instado a los civiles palestinos a buscar refugio.
Autoridades y residentes denunciaron bombardeos en los campamentos de refugiados de Bureij y Maghazi del centro de Gaza y en las sureñas ciudades de Khan Yunis y Rafah, donde buscaron protección decenas de miles de desplazados del norte, parte del cual está en ruinas.
En Maghazi, al menos cinco personas murieron y varias más resultaron heridas en un bombardeo israelí que alcanzó una escuela secundaria donde se refugiaban desplazados palestinos, informó la cadena de noticias qatarí Al Jazeera.
La cadena mostró imágenes de víctimas que eran trasladadas a hospitales cercanos. Algunos de los fallecidos yacían en el suelo del hospital mientras familiares y amigos afligidos lloraban sobre sus cuerpos.
En Bureij, varias casas fueron destruidas por aviones israelíes, en medio de explosiones y ráfagas de disparos en la parte este del campamento, que alberga, como los demás, a refugiados de la guerra de 1948 entre Israel y países árabes.
Residentes citados por la agencia de noticias palestina Maan dijeron que los continuos bombardeos impedían acudir en ayuda de las víctimas en los edificios alcanzados.
El Ejército israelí ordenó ayer a los residentes evacuar los campamentos de Maghazi y Bureij hacia la cercana ciudad de Deir al-Balah luego de lanzar acciones terrestres en esa parte del asediado territorio.
Desde hace semanas, las fuerzas israelíes libran intensos enfrentamientos urbanos en el norte de Gaza y en Khan Yunis, y la apertura de una tercera zona de combates llega luego de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometiera intensificar la ofensiva.
La nueva orden de evacuación del Ejército cubre un área del centro de Gaza que albergaba a casi 90.000 personas antes del inicio de las hostilidades y ahora alberga a más de 61.000 desplazados, en su mayoría del norte, según la oficina humanitaria de la ONU (OCHA).
Israel ha dicho que la campaña de bombardeos y la ofensiva terrestre son necesarias para desmantelar a Hamas y evitar que se repita su ataque del 7 de octubre, en el que milicianos infiltrados desde Gaza mataron a 1.200 personas, en su mayoría civiles, en el sur israelí.
Unas 240 personas fueron secuestradas y llevadas a Gaza ese mismo día, y unas 130 siguen cautivas luego de la liberación de más de un centenar el mes pasado durante una tregua de una semana mediada por Qatar, Egipto y Estados Unidos.
Los objetivos de destruir a Hamas y liberar a los rehenes “no son fáciles de alcanzar”, y “la guerra continuará muchos meses más”, dijo ayer el jefe del Ejército israelí, teniente general Herzi Halevi.
La ofensiva ya es una de las campañas militares más devastadoras de la historia reciente.
Más de 21.100 palestinos, la mayoría de ellos mujeres y niños, murieron en bombardeos israelíes en Gaza desde el 7 de octubre, incluidas 195 personas en las últimas 24 horas, informó hoy el Ministerio de Salud del Gobierno de Hamas en Gaza.
Cerca del 85% de la población de Gaza, de 2,3 millones de palestinos, ha huido de sus hogares, hacinándose en áreas cada vez más pequeñas en las últimas semanas a medida que Israel expande su ofensiva terrestre, que comenzó el 27 de octubre en el norte del territorio.
La ONU dice que una cuarta parte de la población del territorio está sometida a la hambruna bajo el asedio de Israel, que permite la entrada a cuentagotas de alimentos, agua, combustible, medicinas y otros suministros.
La semana pasada, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución vinculante que pidió acelerar inmediatamente la entrega de ayuda a la población civil de Gaza, pero casi no hubo cambios sobre el terreno.
Llamados de Estados Unidos a su aliado Israel a minimizar las bajas civiles y gran presión internacional para que declare un alto el fuego también han tenido poco efecto sobre el Gobierno israelí de Netanyahu.
Israel culpa a Hamas por el alto número de muertes civiles en Gaza, acusándolo de operar a propósito en áreas residenciales densamente pobladas para usar a los civiles como escudos humanos.
Las bajas entre los soldados israelíes van en aumento, con tres muertos más informados hoy por el Ejército, para un total de 164 desde que comenzó la ofensiva terrestre.
El conflicto ha causado indignación en el mundo árabe e islámico y encendido otros frentes en Medio Oriente.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, volvió a comparar hoy el tratamiento que Israel da a los palestinos de Gaza con el que los nazis alemanes dieron a los judíos y dijo que Netanyahu “no es diferente de Hitler”.
Israel y el grupo islamista libanés Hezbollah han intercambiado disparos en repetidas ocasiones a lo largo de la frontera.
Un ataque israelí contra una casa familiar mató anoche a un combatiente de Hezbollah, a su hermano y su cuñada, informaron autoridades locales. Otro familiar resultó herido.
En Cisjordania, los otros territorios palestinos, ocupados y colonizados por Israel, bombardeos de drones israelíes mataron hoy seis palestinos en el campamento de refugiados de Nur Shams, cerca de la norteña ciudad de Tulkarem, informó el Ministerio de Salud palestino.
Más de 300 palestinos han muerto en Cisjordania desde el inicio de la escalada entre Israel y Hamas, la mayoría en operativos militares y algunos en ataques de colonos israelíes.
El Ejército israelí dijo hoy que atacó por aire, tierra y mar más de 200 blancos en Gaza en las últimas 24 horas.
En Deir el-Balah, un bombardeo israelí destruyó hoy la mezquita de Jaffa, informó Al Jazeera, que difundió imágenes del templo en ruinas y de casas vecinas seriamente dañadas.
En Khan Yunis, al menos 20 personas murieron y muchas más resultaron heridas en un bombardeo que alcanzó edificios residenciales frente al Hospital Al Amal de la ciudad, informó el Ministerio de Salud.
En Rafah, en el extremo sur, en la frontera con Egipto, un gran ataque aéreo israelí alcanzó edificios residenciales en el barrio de Al Jenina, en el sureste de la ciudad, donde redujo a escombros un gran número de viviendas, informó también la cadena qatarí.
La resolución aprobada la semana pasada por el Consejo de Seguridad de la ONU pidió nombrar un coordinador humanitario de la ONU para supervisar la distribución de la ayuda en Gaza, y ayer fue nombrada en ese cargo Sigrid Kaag, la exministra de Finanzas neerlandesa.
La resolución deja en manos israelíes la vigilancia operativa del suministro de ayuda a Gaza, donde las telecomunicaciones se estaban restableciendo el miércoles después de un nuevo corte el día anterior, según el operador palestino Paltel.
A medida que aumentan los temores de un conflicto regional más amplio, Estados Unidos, Qatar y Egipto han estado trabajando en un nuevo acuerdo para liberar a más rehenes en poder de Hamas.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló ayer con el emir gobernante de Qatar.
Hamas dice que no liberará más rehenes hasta que Israel ponga fin a la guerra y que cambiará a los cautivos restantes por un gran número de prisioneros palestinos, incluidos varios de sus comandantes militares. Israel ha rechazado ambas exigencias.
Egipto presentó esta semana una propuesta para poner fin al conflicto que incluiría la liberación de todos los rehenes retenidos en Gaza y de todos los palestinos presos en Israel, así como el establecimiento de un gobierno de tecnócratas palestinos para administrar Gaza y la Cisjordania.
El plan recibió una fría acogida de ambas partes, pero ninguna lo rechazó de plano.
El rey Abdullah II de Jordania se reunió hoy en Egipto con el presidente Abdel Fatah al Sisi, quienes dijeron luego que rechazarán cualquier intento israelí de echar a palestinos de Gaza y Cisjordania. También pidieron un alto el fuego y ayuda para Gaza.