Sergio Massa convocó a un Gobierno de unidad nacional: “La grieta se murió”
El candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, subió al atril del búnker de avenida Corrientes pasada las 23 de ayer y agradeció a los argentinos que “abrazan el sistema democrático” por haber tenido un domingo electoral en paz y tranquilidad.
“Gracias a todos ellos por ir a votar. Los argentinos abrazan este sistema para elegir a quiénes nos gobiernan. Quiero agradecerles a los que depositaron su confianza en nosotros. El país vive una situación difícil, compleja, lleno de desafíos. Sin embargo, creyeron que éramos la mejor herramienta para construir una nueva etapa en la historia argentina. Quiero hablarles a los argentinos que lo eligieron a Miryam, a Juan, quiero hablarle a esos miles de radicales que comparten con nosotros valores democráticos como la educación pública, la independencia de poderes, la defensa de valores instituciones. La Argentina se merece. Nos merecemos”, señaló Massa.
También, Sergio Massa le habló a los que no votaron el espacio que lo lleva como candidato, y abogó por una Argentina en paz, con orden, sustentada sobre la base de valores democráticos y lo que quieren un país con certezas.
“Haré el mayor de los esfuerzos para ganarme su confianza. Mi compromiso es construir más argentinidad, construir más orden, más seguridad, mi compromiso es reglas claras frente a la incertidumbre; que tengamos la capacidad de que nuestros hijos puedan ir con una compu en la mochila y no con un arma en la mochila. Quiero reiterar lo que vengo planteando desde el primer día que decidí ser candidato a presidente. Voy a convocar a un gobierno de unidad nacional desde el 10 de diciembre, construido sobre la base de convocar a los mejores, sin importar su fuerza política y no desde la base de acuerdos partidocráticos. Tengo la seguridad de abrir una nueva etapa constitucional en la Argentina. Establecer los pilares de política de Estado, para construir una Industria Argentina fuerte, contra los que plantean abrir los mercados”, añadió.
En otro orden de su discurso, se refirió a aquellos desafíos que enfrentará desde el 10 de diciembre. “Quiero convocar a la construcción de un régimen laboral moderno, sin renunciar a derechos conquistados por los y las trabajadores argentinas. Quiero convocar en base a un desarrollo federal, más desarrollo para el Norte y la Patagonia, más inclusión sobre la base de la construcción de un país que aumente sus exportaciones con valor agregado, para incluir a las personas con discapacidad. No son un número. Quiero convocar a que entendamos que la Argentina que viene es del abrazo entre el campo y la Industria, más desarrollo argentino. Quiero convocarlos a que tengamos la capacidad de poner un punto final de la destrucción del otro, del amigo y enemigo; la grieta se murió y empieza una nueva etapa desde el 10 de diciembre”, sentenció.
“Quiero contarles que a lo largo del día recibí, y mucho más después de las 19, el llamado de muchos presidentes y dirigentes de otros países. Que obviamente miraban con enorme interés qué pasaba en la elección de Argentina de hoy, porque saben que queremos una Argentina integrada, saben que creemos en el multilateralismo, porque saben que somos garantes de estabilidad y seguridad respecto de las relaciones con el mundo y sobre todo que somos garantía de seriedad a la hora de establecer relaciones”, contó el ministro en medio de la ovación de los militantes.
Y añadió: “Les transmití mi convicción de que ese país al que hace muchos años llegaron mis viejos escapando de la guerra, es el país que íbamos a construir desde el 10 de diciembre en mi gobierno. Y creo que de alguna manera ese compromiso tiene que ver con poner en valor lo nuestro, sentir orgullo por cada una de nuestras cosas, por sentir pasión por nuestra patria y nuestra bandera, por nuestro himno, lo que nos obliga a trabajar juntos abrazando al otro aunque piense distinto”.
Finalmente concluyó: “Quiero decirle a cada argentino y argentina: voy a ser un presidente que va a honrar nuestra constitución y nuestra bandera, ese es mi compromiso. Soy consciente de que muchos argentinos nos votaron como una forma de señalar lo que querían y lo que no. De señalar un camino. Pero no nos dieron un cheque en blanco. Y de alguna manera el resultado de ese mandato me obliga a trabajar el doble para convencerlos y estén tranquilos y seguros de que eligieron un presidente que honra su mandato y esa confianza”.