Fue condenada a 75 años de cárcel por provocar torturas “inimaginables” a una joven

Alicia Calderón, una residente del estado de Texas (EE.UU.) de 37 años, pasará los próximos 75 años tras las rejas después de ser declarada culpable de perpetrar torturas inimaginables a una joven, que incluyeron quemaduras con agua hirviendo, restricción de alimentos, falta de comunicación con el mundo exterior y privación de la asistencia médica, según la sentencia dictada este martes informa Fox News.

Calderón engañó a la víctima para que viviera con ella y luego la controló mediante torturas inimaginables”, sostuvo Greg Willis, fiscal de distrito del condado de Collin. “Quemó gravemente los brazos, el pecho y la espalda de la víctima echándole una olla de agua hirviendo. También la privó de comida, la encerró en una jaula para perros y le cortó la comunicación con el mundo exterior“, precisó.

La sentenciada había llegado a un acuerdo con la chica de 24 años en 2019, mediante el cual le permitía a esta vivir en la casa rodante de su familia sin pagar alquiler a cambio de mantener la casa limpia y cuidar tanto a sus hijos como a una anciana discapacitada.

El trato funcionó solo los primeros meses, porque después Calderón le quitó el móvil a la joven y le restringió la comida, así como el movimiento dentro y fuera de la casa.

La chica perdió la mitad de su peso corporal y ya no pudo cuidar a la anciana. Las agresiones de Calderón llegaron su punto máximo cuando, en 2021, sorprendió a la hambrienta joven robando comida, la encerró en una jaula para perros y le echó agua hirviendo, quemándole las piernas. Luego, durante una discusión, volvió a hacerlo, lesionándole gravemente distintas partes del cuerpo, y le negó atención sanitaria.

Recién en febrero de 2022, usando el teléfono de una persona que vivía en la casa, la víctima pudo pedirle ayuda a su padrastro a través de un mensaje en redes sociales. El hombre llamó al 911.

Al llegar, los agentes tuvieron que retirar las piedras que tapaban la puerta para que la joven pudiera salir. Cuando fue liberada, pesaba unos 30 kilos, tenía la cabeza rapada y el cuerpo cubierto de quemaduras en segundo y tercer grado.

Tuvo que pasar seis semanas en el hospital para recuperarse de las heridas y la desnutrición.

En el transcurso del juicio, los fiscales revelaron que Calderón, en tres meses, había gastado 78.000 dólares de una herencia recibida por la anciana en el alquiler de un local para fiestas, llantas y tatuajes. Además, había cobrado sus cheques de la seguridad social durante años.