Estudio alerta que la yerba mate podría triplicar el riesgo de cáncer
Con notable pedagogía el sitio británico informó que el mate es “un té de hierbas que se hace de las hojas y troncos de la planta Ilex paraguariensis” y que “típicamente se dejan secar al fuego antes de embeberlas en agua caliente para hacer la bebida”. “Como fumar 100 cigarrillos”, advierte en el título.
Aunque en el pasado se asoció al mate con beneficios para el sistema inmunológico (y una gran capacidad para despertar hasta a los más soñolientos) los nuevos descubrimientos dan cuenta de la alta concentración de hidrocarburos aromáticos policíclicos, entre ellos el benzopireno, que es cancerígeno.
Ese componente cancerígeno unido a la alta temperatura del agua pueden dar como resultado una mayor predisposición al cáncer de laringe, por ejemplo.
En el caso del cáncer de esófago las probabilidades de contraerlo se triplican si se toma mate de manera excesiva.
Por desgracia el estudio no aclaró cuánto mate es mucho mate, pero sí se estableció: “como la mayoría de los hidrocarburos aromáticos policíclicos son hidrofóbicos en general se consideraba que no se liberarían en gran cantidad en el agua, pero nuestros resultados están en contra de esta conclusión”.
“Aunque bajos porcentajes de hidrocarburos aromáticos policíclicos se liberaron en la primera infusión de muestra, una cantidad sustanciosa se desprendieron en el total de 12 infusiones”, explicaron los investigadores, que asemejaron los mates de laboratorio a “una situación mucho más parecida a la vida real”.