Crónica de una jornada agitada al ritmo de renuncias, respaldos y reuniones apresuradas
Todo comenzó luego de la reunión de más de tres horas que el propio Fernández y Cristina mantuvieron anoche en la Quinta de Olivos para analizar el resultado de las PASO y diseñar una nueva estrategia para intentar revertir los resultados de cara a las elecciones Legislativas.
Tras esa reunión el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, y otra decena de funcionarios nacionales ligados estrechamente a la vicepresidenta pusieron este miércoles su renuncia a disposición de Fernández.
Luego de conocerse la decisión de parte del Gabinete, los funcionarios “albertistas” comenzaron a llegar a la Casa Rosada, entre ellos los ministros de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; de Seguridad, Sabina Frederic; de Producción, Matías Kulfas, de Economía, Martín Guzmán; de Trabajo, Claudio Moroni; el canciller Felipe Solá y el titular de Obras Públicas, Gabriel Katopodis.
También se encontraban en Casa de Gobierno el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; la vicejefa de Gabinete Cecilia Todesca; y la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra.
También se lo vio ingresar a la Casa Rosada al ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández, actual interventor de los Yacimientos Carboníferos Río Turbio.
En tanto en las oficinas del Frente Renovador en el barrio porteño de Retiro, Sergio Massa, tercera pata clave del armado del Frente de Todos, convocó a “sus” propios funcionarios para delinear los pasos a seguir.
Así planteado el escenario el gobierno quedó momentáneamente partido en tres con el krichnerismo apurando cambios, el albertismo intentando mantener la cohesión del Frente de Todos y resistiendo presiones y el massismo buscando su propio lugar en esta puja.