Contador santiagueño casi mata a golpes a su concubina, estudiante de psicología, delante del hijo de ambos

Un conocido contador y taekwondista fue detenido, acusado de atacar a trompadas y patadas a su esposa, estudiante de licenciatura en psicología, luego perseguirla una cuadra y media y destrozar la puerta del comercio en que la víctima buscó refugio. Cada uno de los capítulos de esta historia conlleva una profunda investigación, sostenida en testimoniales y pericias, a cargo de la fiscal Lucía González Farías.

Según la denuncia de la damnificada ante las autoridades de la Comisaría Comunitaria Nº 1 de la Mujer y la Familia, ella es estudiante en Licenciatura de Psicología, de 34 años, y el acusado, un contador de apellido Alderete, con quien convive hace 12 años y con el que tiene un hijo de 9 años.

Domiciliados en una casa de avenida Belgrano al 800, del Bº Centro, el escándalo se registró el viernes después de las 19.30. En su extensa presentación, la mujer relató que primero se trasladó al centro y compró un regalo para su padre, quien cumplía años ese día.

Ya mientras la misma buscaba el presente, su esposo comenzó a enviarle una batería de mensajes por WhatsApp. Todos conllevaban un denominador común, los celos: “Estás con otro…“, insistía.

Violencia sin filtros

Ni bien cruzó el umbral de la puerta, fue recibida a trompadas. Derribada, en el piso habría recibido una andanada de patadas en la cabeza por lo cual quedó aturdida. Como pudo, la mujer hizo señas a su hijo para escaparse. Pero el niño estaba descalzo y su madre fue en busca de calzado y otra vez recibió golpes.

Para entonces solo atinaba a fugarse. Abrió la puerta y emprendió una veloz carrera. Detrás, la siguió el contador, ampliaron los testigos que ya declararon tras la denuncia. Agotada, la damnificada alcanzó a entrar en un comercio de Garibaldi y San Juan. Su dueño la dejó entrar y cerró la puerta. Al instante, el contador llegó y empezó a golpear la puerta a patadas.

Para entonces, los vecinos ya habían llamado a la policía. Apareció un patrullero y el contador fue conminado a detenerse. En efecto, en menos de una hora quedó formalmente detenido, por disposición de la jueza de Género, Cecilia Laportilla.

El panorama aún puede ponerse peor para el contador. El propietario del comercio, cuya puerta destrozó, también accionaría en su contra.

Bochorno II: también habría golpeado al hijo de 9 años 

La víctima ahondó a los policías que ni bien escapó, resolvió trasladarse a lo de su madre. Mientras, en su casa, quedó el contador y el hijo. La presentación amplió que el menor envió un whatsapp a su madre confiándole que después de la ira con ella, él padeció la furia de su progenitor.

En efecto, se sabe que el sujeto habría agredido también a su hijo golpeándolo en la cabeza, por lo cual ahora la Fiscalía no descartaría realizar una Cámara Gesell al niño, a fin de que sea escuchado también por los psicólogos del Poder Judicial y después resolver el camino a seguir ante este incidente.